miércoles, 8 de julio de 2009

POESIA DELMIRA AGUSTINI


Delmira Agustini
( 1886 - 1914 )
Nació y fue criada en una familia que, a pesar de ser conservadora y tener conductas estrictas, la mimaban mucho. Su padre era Santiago Agustini (m. 8 de julio de 1925),[1] uruguayo, y su madre María Murtfeld Triaca (n. Buenos Aires, Argentina, por 1860 - m. 18 de julio de 1934).[2]
Fue una niña precoz. Además de componer versos desde que tenía 10 años, realizó estudios de francés, música y pintura.
Colaboró en la revista La Alborada, también en Apolo del poeta Manuel Pérez y Curis. Formó parte de la Generación de 1900, junto a Julio Herrera y Reissig, Leopoldo Lugones y Rubén Darío, al que consideraba su maestro. Darío llegó a compararla con Santa Teresa, diciendo de ella que era la única, desde la santa, en expresarse como mujer.
Se especializó en la sexualidad femenina en una época en la que el mundo estaba dominado por el hombre. Su estilo pertenece a la primera fase del Modernismo y sus temas tratan de la fantasía y de materias exóticas.
Eros, dios del amor, simboliza el eroticismo y es la inspiración para los poemas de Agustini sobre los placeres carnales. Eros es el protagonista en muchos de sus poemas y obras literarias. Dedicó su tercer libro a este último, titulado Los cálices vacíos (1913), lo que significó su entrada al movimiento de vanguardia.
Contrajo matrimonio con Enrique Job Reyes el 14 de agosto de 1913, pero por diversas desavenencias conyugales lo abandonó un mes y medio más tarde, divorciándose el 5 de junio de 1914. En julio del mismo año muere asesinada por su ex-esposo, que después se suicidó.

Engarzado en la noche el lago de tu alma,
diríase una tela de cristal y de calma
tramada por las grandes arañas del desvelo.
Nata de agua lustral en vaso de alabastros;
espejo de pureza que abrillantas los astros
y reflejas la cima de la Vida en un cielo...
Yo soy el cisne errante de los sangrientos rastros,
voy manchando los lagos y remontando el vuelo.
Extraido literalmente de:

martes, 7 de julio de 2009